El lunes me atacó mi gato de 11 años, Coco, en un arrebato de celos por Asia, la nueva gatita que compone nuestro hogar. Me hizo bastante daño y tuve que ir a urgencias. Por la medicación que me pudiesen dar comenté la posibilidad de un embarazo. Me dieron amoxicilina, me inyectaron la antitetánica, y se disponían a hacerme una placa...llego a rayos y le comento lo mismo a la técnico, y me dice que si no estoy segura de estarlo me haga una prueba allí mismo. Yo pensé que sería genial en ese instante saber si iba a ser mamá, o más bien confirmar lo que ya sospechaba y más para papá, que acababa de saber que iba a ser tío por segunda vez y sería una noticia increíble.
-Lo siento, no estás embarazada...
Ya me temía ese resultado...al fin y al cabo solamente hace 10 días de mi ovulación, y tengo entendido que los tests del hospital no son muy sensibles.
Papá me miró, con cara de pena y musitó un "Jo...que desilusión, estaba convencidísimo que sí"
Le cogí la mano, le miré a los ojos y le dije "Tranquilo, aún es muy pronto y puede ser un falso negativo...de hecho estoy bastante segura"
Faltaban 3 días para mi menstruación.
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